martes, 13 de abril de 2010

“Todo se lo debo a Jesucristo”

"¡Oh Dios mío y Señor mío!"

Quita de mi corazón toda soberbia;

Todo pensamiento altivo;

Todo sentimiento de superioridad, orgullo….

Que no pronuncien mis labios palabras de arrogancia…

Que no diga frente a los hombres que mis logros y conquistas

sólo a mí se deben…..;

De que lo hice porque fui mejor que otros…….;

De que superé las dificultades debido a mi propio poder…..;

De que logré salir del hoyo gracias a mi energía vital……..

“Cuando yo mismo sé, oh Dios mío, que fue tu Misericordia

y tu Bondad Amorosa e Inmerecida, la que me alzó del polvo

mismo…….

Pon en mí, sí, oh Señor, un Corazón Nuevo, que las Glorias de

este mundo impío no logre contaminar……..

Porque Yo bien sé que todas las cosas te pertenecen, y que Tú

repartes a los hombres conforme a sus obras, y de acuerdo

a tú Justicia.

Bendito sea siempre Tu Nombre Jesucristo, Rey de Reyes.

Amén.

F.D.A.P

No hay comentarios:

Publicar un comentario